El Largo Viaje al Trabajo en la Chicago de los Inmigrantes

En el barrio Little Village de Chicago, el trabajo temporal es repartido por un submundo de intermediarios del empleo, conocidos como “raiteros,” que colaboran tácitamente con algunas de las empresas más conocidas y las agencias de trabajo temporal (temp) más grandes en los Estados Unidos. Las agencies y empresas anfitrionas consiguen mano de obra en tiempo real en el momento que la piden. Pero los obreros son forzados a esperar largas horas y pagar por transporte y el cobro de cheques de paga, lo que empuja sus ingresos por debajo del sueldo mínimo. Reportaje relacionado: Llevados al Engaño: Agencias Temp y ‘Raiteros’ en la Chicago de los Inmigrantes »

Little Village en la zona oeste de Chicago alberga la comunidad mexicana más grande del medio-oeste. También alberga un submundo de redes de intermediarios del empleo que trabajan de cerca con algunas de las mayores agencias temp de la nación para proveer mano de obra barata a grandes corporaciones. (Sally Ryan para ProPublica)

Los obreros empiezan a juntarse tan temprano como las 4 de la madrugada después de ser convocados por sus “raiteros” para trabajo temporal. Sirven a empresas de marcas conocidas como Ty Inc., Pampered Chef y Fresh Express. (Sally Ryan para ProPublica)

Los raiteros transportan hasta mil trabajadores al día en camionetas y autobuses a almacenes por todo el área de Chicago. Trabajadores dicen que han empaquetado productos que tenían las marcas de Sony, Frito-Lay, Pampered Chef, Smirnoff y Marlboro. (Sally Ryan para ProPublica)

Rigo, un raitero que cumple pedidos para la agencia temp Select Remedy, avisó a obreros en enero que se encontraran con él no más tarde de las 4:30 am en un callejón detrás de una clínica dental iluminada por neón azul y una tienda que vende vestidos de quinceañera, tal como se ve en el reflejo de una ventana. (Sally Ryan para ProPublica)

Muchos trabajadores llegaron aún antes de las 4:30 a.m. y subieron a un autobús escolar amarillo, parte de una flota de camionetas y autobuses que Rigo usa para transportar el número justo de obreros al lugar justo en el momento justo para las agencias temp. (Sally Ryan para ProPublica)

Pero no son las agencias temp que pagan a los raiteros. Son los trabajadores –como los que se ven en el autobús arriba—quienes les pagan, normalmente $8 al día. Después de esta deducción de $40 por semana, la mayoría de los obreros ganan menos que el sueldo mínimo. (Sally Ryan para ProPublica)

En esta mañana de enero, el autobús, seguido por un reportero y una fotógrafa de ProPublica, transportó a los trabajadores aproximadamente 30 millas hasta un almacén de Ty Inc., uno de los mayores fabricantes de peluches del mundo gracias a la locura de los Beanie Babies en los noventa. Ty declinó hacer comentarios para esta historia. (Sally Ryan para ProPublica)

Al llegar, los trabajadores bajaron del autobús a las 5:30 a.m., entraron en el almacén, firmaron una hoja de papel y esperaron hasta justo antes de las 6 a.m. cuando finalmente pudieron empezar a ser pagados. (Sally Ryan para ProPublica)

Como se ve en esta foto tomada con un Smartphone, un letrero al lado del reloj de ponchar en el almacén de Ty dice en español, "Por favor de no ponchar hasta las 5:55 a.m. Esta medida será estrictamente aplicada y se tomaran medidas con los empleados que no siga la regla." (Michael Grabell/ProPublica)

Como resultado, los trabajadores esperan una hora y media desde el momento que llegan al callejón de Little Village hasta la hora que pueden fichar cada día. Tomando en cuenta ese tiempo de espera y las tarifas, su ingreso por hora cae más de $2 por debajo del sueldo mínimo. (Sally Ryan para ProPublica)

Hasta hace poco, Rigo, el raitero, retiraba los cheques de paga de Select Remedy y los dejaba en esta casa de cambio en Little Village. Allí, los cajeros sacaban la cantidad debida por el transporte además de una tarifa de alrededor de $3 o $4 por canjear el cheque. (Sally Ryan para ProPublica)

Muchos otros raiteros traen los cheques de paga de los obreros a H Services Exchange en 26th Street y Hamlin Avenue en Little Village. Los trabajadores dicen que se sienten presionados a cobrar sus cheques con estos agentes y a veces tienen problemas para llegar a ser pagados. (Sally Ryan para ProPublica)